Tal vez creas que los gatos pueden tomar leche. Y de manera convincente llegarán a tu memoria toda clase de recuerdos de pelis o dibujos animados de Disney donde se ve a un lindo gatito saborear la leche con placer. Pero en realidad, en la mayoría de los casos, los mininos son intolerantes a la lactosa.
Por eso, hablemos de la relación entre los gatos y la leche. Y también de las medidas que has de tomar para darle leche al tuyo en caso de que sea un cachorro, como por ejemplo usar un biberón para gatos y leche maternizada para gatos.
Es fundamental que, en sus primeras 3 semanas de vida, los gatitos se alimenten de la leche de la madre. Pero al crecer, su sistema digestivo cambia, y como consecuencia de esto, sus necesidades nutricionales. Algunos, de hecho, se vuelven intolerantes a la leche y les puede caer bastante mal, provocándoles diarrea e incluso vómitos.
Sin embargo, si un cachorro sigue tomando leche con frecuencia tras el destete, es posible que no le haga daño tomarla en la época adulta. Pero en ningún caso es recomendable que su alimentación dependa únicamente de ella, pues necesita de otros nutrientes para su desarrollo y salud física.
En sus primeras semanas, es crucial que los gatos obtengan los nutrientes necesarios para fortalecer el sistema inmunológico y preparar el organismo para la edad adulta. De ahí que sea vital la leche materna para suplir dichas necesidades nutricionales.
¿Pero qué hacer si nos encontramos en presencia de uno o varios gatitos huérfanos? Lo primero, saber que la leche de vaca no es buena para ellos, debido a su alta concentración de lactosa. Por eso te aconsejamos adquirir leche maternizada para gatos, ya que la eche para gatos recién nacidos es especialmente nutritiva, con un alto índice de proteínas y vitaminas imprescindibles para su crecimiento. Y también es importante que adquieras un biberón para gatos bebes, pues así podrás darles la leche de forma correcta y sin riesgo de que se ahoguen.
En cualquier caso, no tengas miedo de optar también por opciones como productos específicos para gatitos lactantes, como los alimentos Kitten y Neutered que puedes encontrar en nuestra sección de comida para gatos y están elaborados para gatos bebés, teniendo en cuenta todas sus necesidades.
La cantidad de la leche maternizada para gatos debe variar según el peso del gatito. La cantidades que te mostraremos a continuación deben racionarse en 4 tomas diarias con una frecuencia de 3 a 4 horas, período que debe irse extendiendo a medida que el felino crezca:
Los gatos pueden tomar leche de esta forma cuando son bebés, pero además siempre debe estar tibia. Para asegurarte, puedes echarte un poco en la mano y comprobar su temperatura. Tras la cuarta semana comienza la adaptación del gatito a una dieta blanda. Y algunos pueden y quieren ir probándola a partir de la tercera semana.
Si tu mascota es adulta y quieres darle leche, puedes adquirir leche especial para gatos. Pero es preciso que antes hagas algunas pruebas con pequeñas cantidades de esta mencionada leche para gatos adultos. Acuérdate lo que hemos dicho antes, que algunos felinos en la edad adulta pueden presentar alergias a la lactosa. O peor, esta les puede provocar daños severos en su digestión, lo que se puede ver reflejado en vómitos o diarreas. Por eso y porque de ella no obtendrá los nutrientes necesarios, lo mejor es no basar la dieta de tu gato en leche.
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