Tipos de antiparasitarios para perros: pipetas, collares, pastillas y sprays. ¿Cuál elegir?

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Es fundamental que mantengamos la protección contra los parásitos en nuestros perros para poder mantener su salud y bienestar ya que pueden causar desde molestias leves hasta enfermedades graves, algunas que incluso pueden transmitirse a humanos. Además, recordemos que están presentes todo el año, no sólo en épocas de calor.

Pipetas, collares, comprimidos, aerosoles… Hay muchas opciones en el mercado y, a veces, se puede complicar un poco la elección del más adecuado para nuestro caso. Por eso debemos valorar cuál elegir dependiendo de nuestro perro, su estado de salud, si convive con niños u otros animales y su estilo de vida (si tiene contacto con animales de granja, si se baña en ríos, si frecuenta muchos parques o montaña o si es más de paseos cortos en la ciudad…).

¿Por qué es importante proteger a tu perro de parásitos?

Los parásitos pueden afectar seriamente a la salud de nuestros perros si no prevenimos su infestación.

Tipo de parásito	Ejemplos	Efectos en el perro	Otros riesgos
Externos	Pulgas	Causan picor, irritación y alergias.	Transmiten tenias y pueden causar dermatitis alérgica.
	Garrapatas	Pueden provocar anemia y debilidad.	Vectores de babeosis, ehrlichiosis y enfermedad de Lyme.
	Ácaros	Generan infecciones cutáneas severas y sarna.	Pueden propagarse a otros animales y personas.
Internos	Lombrices intestinales	Provocan vómitos, diarreas, pérdida de peso y anemia.	Pueden contagiarse a otros animales o personas a través de las heces.
	Tenias	Provocan problemas digestivos y adelgazamiento.	Pueden transmitirse a humanos mediante la ingestión de alimentos contaminados.
	Gusanos del corazón	Afectan al sistema circulatorio y pueden ser mortales sin tratamiento.	Se transmiten por la picadura de mosquitos y pueden causar insuficiencia cardíaca.

La prevención de estas enfermedades hace que actuemos antes de que el problema aparezca y así evitamos lo máximo posible las consecuencias negativas: evitamos que el perro sufra síntomas, protegemos el entorno y a los humanos que convivimos con ellos, es más económico y fácil de controlar una infestación puntual que una enfermedad ya avanzada… También, en muchos casos, tenemos que tener en cuenta que los tratamientos no siempre eliminan todos los daños ya causados.

Tipos de antiparasitarios para perros

Pipetas antiparasitarias

Las pipetas antiparasitarias son un formato de protección externa en forma de líquido que contiene sustancias activas (y viene en formato “pipeta” para su fácil aplicación), que se distribuyen directamente sobre la piel de perro, creando una barrera protectora que mantiene alejados a los parásitos o los elimina al entrar en contacto con ellos. Generalmente, la recomendación es aplicarla entre los omóplatos.

Su duración es aproximadamente un mes, aunque puede variar ligeramente según la marca y el tipo de parásito. También varía si la zona en la que residimos tiene temperaturas muy elevadas y/o si son endémicas.

Para que su aplicación sea lo más eficaz posible el perro debe estar seco y no debe haberse bañado ni 48h antes de su aplicación ni tampoco posteriormente a aplicársela. Debe separarse el pelo y aplicar el contenido de la pipeta en la piel entre las escápulas, de manera que el perro no llegue a lamerse la zona en la que la hemos depositado. Recomendamos también lavarnos las manos después de aplicársela.

Pros y contras

Pros	Contras
Muy eficaces frente a varios parásitos (muchos protegen también contra leishmaniosis).	Su eficacia puede verse reducida si bañamos al perro con frecuencia.
Fácil y rápida aplicación.	Algunos perros con piel sensible pueden presentar dermatitis.
Ideal como mantenimiento mensual.	Hay que reaplicar muy a menudo.

Los recomendamos principalmente para perros que pasan mucho tiempo en el exterior y para aquellos que tienen el estómago sensible y no toleran bien los comprimidos orales.

Collares antiparasitarios

Estos antiparasitarios son una forma práctica de protección continua frente a parásitos externos como pulgas, garrapatas y flebótomos (transmisores de leishmaniosis). Se colocan alrededor del cuello del perro y liberan activos de forma continua a través de la piel.

Los collares antiparasitarios químicos liberan lentamente las sustancias repelentes por la epidermis del perro. Algunas marcas ofrecen protección de hasta 8 o 12 meses, lo que los hace una opción ideal para aquellos que buscan protección a largo plazo. También existen en el mercado collares naturales hechos con aceites y extractos vegetales que ofrecen una protección más “suave” y, generalmente, menos duradera. Esta opción sería recomendable como apoyo de otros antiparasitarios o para perros con pieles extremadamente sensibles.

Pros y contras

Pros	Contras
Protección a largo plazo, ideal para tutores “olvidadizos”.	Algunos perros pueden ser sensibles a sus activos y presentar irritaciones.
Cómodos y fáciles de usar, sin aplicaciones recurrentes.	No todos protegen frente a todos los parásitos.
Algunos son resistentes al agua.	Hay que tener precaución de que el collar no se enganche y comprometa la seguridad del perro.

Los recomendamos principalmente para perros que viven en zonas rurales y tutores que prefieren protección duradera en el tiempo y de bajo mantenimiento. Son útiles también para poder combinar con otros antiparasitarios en caso de zonas muy afectadas.

Comprimidos antiparasitarios

Estos antiparasitarios son una forma eficaz de proteger al perro contra parásitos externos y, en algunos casos, también internos.

Una vez ingeridos, los activos se absorben y actúan desde el interior del organismo del perro. En caso de parásitos internos (lombrices, tenias…), los ingredientes los eliminan y, en el caso de los externos (pulgas, garrapatas), las sustancias circulan por la sangre y los matan cuando pican al perro.

Su duración depende del producto; algunos actúan entre 1 y 3 meses. Las que cubren únicamente parásitos internos generalmente tienen una duración de 3 meses.

Pros	Contras
Acción eficaz, elimina parásitos ya presentes en el perro.	Puede ser más difícil administrar a perros que toman mal los medicamentos.
Cómodos, pueden combinar ambas protecciones en una sola toma.	Al ser ingeridos, si el perro tiene el estómago sensible, puede presentar vómitos o diarreas.
El baño no afecta a su efectividad.	No tienen efecto repelente, es necesario que el parásito pique al perro para morir.

Lo recomendamos para tutores que buscan una protección completa y también para aquellos que bañan a su peludo con frecuencia. Las pastillas antiparasitarias también son ideales para aquellos que suelen presentar irritación con collares o pipetas o para usarlo como un plan combinado con otro antiparasitario.

Sprays antiparasitarios

Estos antiparasitarios son productos de aplicación tópica que eliminan parásitos externos como pulgas, garrapatas y ácaros de forma casi inmediata. Se pulverizan sobre el pelaje del perro, cubriendo las superficies más afectadas.

Lo ideal es aplicarlo a contrapelo, asegurándonos que la piel queda bien impregnada. Su efecto es rápido pero su duración es muy corta ya que suele oscilar entre varios días y un par de semanas, dependiendo del producto.

Pros	Contras
Acción inmediata, ideal para infestaciones activas.	Duración limitada, requiere aplicaciones frecuentes.
Buena opción para cachorros que aún no pueden utilizar otros antiparasitarios.	Incómodo para perros y tutores, ya que el perro queda “mojado” hasta que el producto se seca y puede desprender olor desagradable.
Ideal como apoyo o refuerzo.	Pueden dejar el pelo del perro opaco o con una textura diferente.

Los recomendamos para infestaciones puntuales y activas o como refuerzo de otros antiparasitarios. Los spray antiparasitarios pueden ser útiles tras pasear por zonas con alto riesgo de presencia de pulgas y garrapatas.

¿Cuál elegir? Factores a tener en cuenta

A la hora de elegir el método más adecuado para tu perro, debes asegurarte de que se adapte a sus características y necesidades específicas.

Edad y tamaño del perro

Algunos productos no se recomiendan para cachorros hasta determinadas semanas de edad. Y muy importante, debemos respetar el peso mínimo indicado en cada antiparasitario para evitar sobredosificar a nuestro perro o quedarnos “cortos” y que sean ineficaces.

Estilo de vida

Si el perro sale a zonas de campo, monte, parques muy frecuentados por otros perros y animales, estarán más expuestos a parásitos. En este caso es mejor optar por protección continua y completa.

Para perros de ciudad también es importante la protección, aunque el riesgo es más bajo. En este caso, podemos optar por métodos más suaves o con una aplicación mensual.

Sensibilidades

Algunos perros pueden presentar reacciones cutáneas o digestivas. Para perros de piel sensible mejor optar por antiparasitarios con una acción más respetuosa y para los que tienen problemas digestivos mejor no recurrir a comprimidos orales.

Compatibilidad con otros medicamentos

En estos casos, es mejor consultar con su veterinario habitual, especialmente si el perro está tomando algún medicamento por enfermedad crónica.

La elección ideal depende de la edad del perro, su peso, su salud, su entorno y sus rutinas. Una buena elección protegerá a tu perro y también a toda tu familia.

Conclusión y recomendación final

A lo largo de esta guía hemos visto lo importante que es proteger a nuestros peludos para garantizar su salud. En resumen:

Disponemos en el mercado de diferentes tipos de antiparasitarios: pipetas, collares, comprimidos y sprays y cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes dependiendo de nuestro estilo de vida y de las características de nuestro perro.
La elección del más adecuado depende de su edad, tamaño, estilo de vida, sensibilidades y medicación (en caso de que la esté tomando).
El método más eficaz siempre es la prevención, para evitar infestaciones que puedan causar consecuencias negativas a nuestro peludo y a nuestra familia.

Recomendaciones generales

Tipo de perro	Recomendación antiparasitaria
Perros que frecuentan campos, zonas rurales, parques, montes…	Lo ideal es combinar varios métodos (por ejemplo, collar y pipeta o collar y comprimido).
Perros urbanos	Pueden beneficiarse de collares o pipetas con protección activa contra pulgas y garrapatas.
Perros con sensibilidad digestiva o de piel	Mejor optar por métodos más suaves o específicos para sus sensibilidades.
Cachorros	Es importante usar solo productos aptos según su peso y edad, como sprays o pipetas suaves.

Cada perro es único. Por eso, aunque esta guía puede ayudarte a despejar dudas, lo mejor siempre es consultar con tu veterinario de confianza, que además conoce el historial clínico de tu peludo y, dependiendo de sus necesidades, puede establecer una pauta de prevención más segura y eficaz para tu compañero.