Max es el nombre del héroe perruno que ha conmovido a la sociedad australiana al pasar 15 horas protegiendo a su humana de 3 años a pesar de ser ya un perro anciano, sordo y medio ciego. Pero su hazaña no ha pasado desapercibida tampoco para la policía local que le ha nombrado perro policía honorario.
Hace una semana Aurora, una niña de 3 años, se perdía junto a Max al cruzar unos matorrales y tuvo en vilo a su familia, a la policía y a un grupo de voluntarios que estuvieron toda la noche buscándola en vano.
No fue hasta el día siguiente cuando Leisa Bennett, la abuela de Aurora, oyó la voz de su nieta mientras recorría la zona; el sonido procedía de lo alto de una montaña y cuando se dirigía hacia allí Max salió a su encuentro y la guió hasta el lugar donde se encontraba la pequeña.
El perro, un pastor ganadero australiano de 17 años, había estado toda la noche junto a la niña protegiéndola del frío y la lluvia y, salvo un par de arañazos, Aurora parecía encontrarse en perfecto estado.
Es probable que te suene la historia o al menos te recuerde a otra muy parecida pero más cercana, la de Enma, la niña de 2 años que se perdió en un pueblo de Ávila y fue encontrada a las 2 de la madrugada descansando plácidamente sobre el lomo de su perro, un podenco adorable.
Fueron los gruñidos del perro al aproximarse el grupo de búsqueda quienes ayudaron a su localización y por tanto, puede decirse que el perro no solo la protegió, le dio calor durante la noche, sino que también contribuyó a su hallazgo.
En ambos casos, estos perros han hecho gala de su generosidad, amor y su instinto de protección y aunque desconocemos el nombre del podenco que salvó a Enma y si eso le supuso algún tipo de reconocimiento, Max fue nombrado perro policía honorario.
Vía: Panda curioso
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