¿Cuándo empieza la temporada de pulgas y garrapatas?

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¿En qué época del año hay más pulgas y garrapatas?

El ciclo de vida de pulgas y garrapatas depende en gran parte de la temperatura, por lo que empezaremos a encontrar más cantidad de estos parásitos cuando se va acabando el invierno y las temperaturas empiezan a subir. Dependiendo de la zona y la presencia de hospedadores (en zonas donde hay ganado o animales silvestres), podemos empezar a encontrar mayor presencia de pulgas y garrapatas a partir de marzo-abril.

Cuando las temperaturas cálidas del verano empiezan a bajar, la supervivencia de los parásitos se ve mermada y empiezan a desaparecer sobre octubre-noviembre.

Estos son tiempos orientativos, ya que en ciertas zonas podrán verse desde antes y aguantar un poco más en otoño, y cada año sobreviven más gracias al aumento de la temperatura global.

Factores que influyen en la proliferación de parásitos

Presencia de hospedadores: zonas donde hay más presencia de ganado o animales silvestres en zonas rurales, o zonas más habitadas y frecuentadas por perros y gatos en ciudades y zonas urbanas.
Parques o praderas con hierba alta o vegetación densa donde pueden camuflarse a la espera de poder saltar a un hospedador.
Áreas climáticas más cálidas y húmedas.

Meses de mayor riesgo según el clima y la ubicación

Primavera y verano en zonas de mayor temperatura y humedad. Desde marzo-abril hasta septiembre-octubre, en zonas climáticas más húmedas o en zonas más secas pero con presencia de humedales o ríos.

¿Cómo afectan las pulgas y garrapatas a las mascotas?

No solo producen el malestar de picores, rojeces y habones, sino que también pueden transmitir enfermedades muy peligrosas como la enfermedad de Lyme o la ehrlichiosis, o transmitir parásitos internos como tenias intestinales.

Síntomas más comunes en perros y gatos

Rascado excesivo, picores, sacudidas, revolcones, lamido excesivo…

Enfermedades que pueden transmitir

Además de producir picores, heridas e infestaciones, también transmiten enfermedades importantes: leishmaniosis, babesiosis, borreliosis (Lyme), ehrlichiosis, anaplasmosis, rickettsiosis, filariosis (gusano del corazón) y algunos parásitos intestinales como la tenia Dipylidium (solo Dipylidium se transmite por picadura de pulga; el resto de parásitos intestinales, como nemátodos, giardias, coccidios, etc., se contagian por comer algo contaminado).

¿Cuándo empezar a usar antiparasitarios?

La mayoría de antiparasitarios externos se pueden usar en perros y gatos a partir de las 8 semanas de vida (2 meses), aunque en casos de infestaciones severas, se pueden usar antes con control veterinario.

Prevención según la estación del año

Para los parásitos externos, es importante que lo hagamos de forma mensual y constante para protegerlo durante todo el año, ya que, con las temperaturas cada vez más altas, es muy frecuente encontrarse con “bichitos” prácticamente en cualquier estación. Sin embargo, es fundamental que lo hagamos en los meses de más calor.

¿Qué tipo de antiparasitario es mejor según la época?

Durante los meses entre noviembre y febrero, con un antiparasitario básico como un collar (si vives en zona urbana) o pipetas en zonas más rurales, es suficiente.

En las épocas de más prevalencia (marzo – octubre), es importante reforzar los collares con pipetas o comprimidos, dependiendo de si vivimos en ciudad o en zonas rurales.

Consejos para evitar infestaciones en casa

Mantener a los animales bien desparasitados.
Quitarnos la ropa de la calle para estar por casa.
Limpiar correctamente mantas, sábanas, alfombras, cortinas y estores, y al mínimo indicio, sobre todo de pulgas, utilizar bombas de humo en casa para prevenir infestaciones en el entorno.
Ventilar adecuadamente la casa todo el año para evitar ambientes cargados de calor y humedad.

Cómo desinfectar el hogar correctamente

Existen en el mercado unas bombas de humo que se pueden poner en estancias vacías de personas, animales y plantas, que acaban con infestaciones de insectos en varias de sus fases de vida, eliminando así pulgas y garrapatas que pueden infestar nuestro hogar.

Es importante dejar objetos que pueden suponer un escondite de parásitos, como mantas, sábanas, alfombras, cortinas y estores, aunque posteriormente haya que lavarlos.

Una zona donde suelen esconder los huevos las pulgas son las rendijas en el suelo entre baldosas o parquet. Es importante asegurarnos de que el insecticida llegue a todos estos rincones y cubra los metros cuadrados de la estancia que queremos limpiar.

Errores comunes al aplicar antiparasitarios

Si queremos garantizar la duración del efecto de la pipeta o de otros antiparasitarios tenemos que seguir los siguientes consejos:

Aplicarlos en el pelo, en lugar de abrir un espacio entre éste para que el producto penetre hasta la piel y se disperse correctamente por todo el cuerpo.
Bañar al perro ese mismo día o días posteriores. La grasa natural presente en la piel del perro o gato ayuda a la dispersión del producto. Si lo bañamos inmediatamente después, estaremos eliminando parte del producto.
Elegir un producto insuficiente para nuestro ritmo de vida o entorno, o elegir incorrectamente el formato del producto en función del tamaño de nuestro compañero.